En mi relato anterior me dediqué a recordar con mucho entusiasmo y, por qué no decirlo, con bastante orgullo, algunos temas de campañas producidas por mi y el equipo de la agencia, que llenaron páginas y horas en prensa, TV y radio.
Las recuerdo con un morbo especial: discusiones, momentos gratos, momentos vacíos de ideas. Pero fué lindo. Como los médicos que hacen cirugías, sangrando, cortando, cosiendo (suturando, como dicen ellos), para después decirle al familiar “Todo salió bien…” y se lo dicen con el uniforme impecable de cirujano, sin sus blancos guantes quirúrgicos ensangrentados.
En nuestro escenario, serían rostros sin afeitar, ojeras por falta de sueño, manos sucias de los bocetistas a la antigua, oficinas llenas de humo y papeleros hasta el tope, hoy Macs humeando. Finalmente, todos reunidos en salas limpias, con aroma a café de Colombia, afeitados y empitucados, las mujeres publicistas arregladitas y ricas, luciendo sus mejores galas, anunciando al cliente…”vamos a presentarles…”
Esto fue parte íntima de Mi Producción, y más la que sigue…
“La Joya Que Calienta”
(Comercial blanco/negro, dirigido por Silvio Caiozzi,
que tiene su historia , introduciendo Junkers.)
“Gasco Sabe Más de Gas”
(Tema creado en la calle, en reuniones con dueños
y dueñas de casa.)
“Gente que Facilita Su Vida”
(Eslogan corporativo pata Hites, creado de una realidad empresarial, y luego suspendido por razones que hacen sonreir mucho.)
Como le conté en Mi Producción anterior, sí, es emocionante recordar. Pero más emocionante, diría ansiedad, pensar en todo lo que falta transmitir: experiencias para “facilitarle la vida” a tantos anunciantes, practicantes y estudiantes de publicidad, para que aprovechen mis aciertos, y se cuiden de las fallas que yo cometí. Dejemos algo para la próxima. Cuídese.